Durante la feria Eurobike 2021, Tradebike pudo entrevistar a Claus Fleischer, CEO de Bosch eBike Systems, justo un día después de que presentaran su nuevo e impresionante Smart System que se empieza a ver en muchas bicicletas eléctricas.
-La gente poco versada en el mundo bike suele relacionar Bosch con electrodomésticos, al menos en nuestro país. ¿No veis complicada la introducción de vuestra marca en el mercado de los componentes para bicicletas?
Cierto, Bosch es conocida por el sector del automóvil y por supuesto, por los electrodomésticos. Ya llevamos en este sector más de diez años. Casi once desde que anunciamos nuestros primeros motores. Desde entonces, hemos desarrollado más y más productos para fabricantes. Y ellos han desarrollado aún más e-bikes para diferentes categorías. Con todo esto, creemos que somos conocidos para los sistemas de e-bikes. Es la imagen que creo que ya tenemos, no solo en Europa, sino en todo el mundo.
-Recientemente habéis presentado vuestros nuevos productos. Si miramos atrás, concretamente a la presentación del año pasado, ¿cuáles dirías que son las diferencias principales entre un año y otro?
Lo más importante es la diferencia entre la tecnología del hardware y el software. Y que ahora nos vamos hacia una conectividad completa. Ahora toda e-bike va 100% conectada con la App Flow de Bosch e Internet. Esto es nuevo del todo. Previamente teníamos Nyon y Kios. Ahora toda bicicleta se conecta con la App Flow, que es una pieza única de conexión, que interactúa con la bici y con la nube. Es la clave para unirte a los dos mundos: físicamente a tu bici y virtualmente.
- Se diría que los productos que presentáis actualmente están más focalizados en el software que no en el hardware…
Es una adición, ya que el núcleo de la e-bike sigue siendo la unidad de conducción, así que seguimos utilizando nuestro rendimiento probado. Tenemos la batería, el motor… al final esto sigue siendo el corazón. Es la experiencia física de ir en e-bike. Ahora añadimos más software porque tenemos la energía y la inteligencia de la electrónica. Sabemos mucho de nuestros inputs, de nuestra fuerza de conducción… y con todo esto podemos generar nuevos servicios e informaciones, ya sea para el seguimiento de actividades o para los modos de conducción. Hay muchas cosas que podemos hacer para que la experiencia de montar en bici sea más valiosa.
- En la entrevista que realizamos a Tamara Winograd (Vicepresidenta en Marketing y Comunicaciones de Bosch eBike Systems), nos comentó que el Covid-19 prácticamente no había tenido efecto sobre vuestro programa de lanzamientos para el año 2021. ¿A día de hoy, teniendo en cuenta que la pandemia no ha pasado, puedes mantener esa misma afirmación? ¿Y en cuanto al 2022?
Puede que el Covid no tenga efectos visibles hacia el exterior de la industria, a los vendedores, la prensa… pero sí que hay una carga de trabajo enorme en el interior de la cadena de valor. Trabajar con proveedores y fabricantes… la verdad es que la industria del ciclismo está luchando por cada bici que puedan construir. Faltan componentes mecánicos. Hay cuadros y horquillas que vienen de Asia. Nosotros, con las e-bikes, tenemos escasez de células de baterías y de componentes electrónicos, y de controladores. También tenemos una gran presión en la cadena de suministro para mantener la producción en funcionamiento. Puede que no se vea, pero nosotros lo podemos sentir. Este año, los héroes de verdad de la industria son los expertos en logística. Ellos consiguen que tengamos productos que podemos usar en nuestra fábricas.
- ¿Cómo valora Bosch la forma final de la nueva norma para procedimientos de tests sobre autonomía de e-bikes (DIN/TS 31064) que entró en vigor a principios de julio?
Es algo en lo que co-trabajamos, lo desarrollamos con las asociaciones de la industria para asegurarnos que el porcentaje medio del apoyo del motor es correcto.
- Lo preguntábamos porque nos gustaría conocer vuestra opinión sobre el hecho de que sean las grandes compañías las que trabajen con las autoridades y grandes asociaciones europeas.
Esto es parte de lo que queremos aportar a la industria de la bicicleta. Aprender a trabajar con los entes oficiales. Somos parte de los grupos de trabajo de regulación de leyes para desarrollar los estándares del futuro. Los estándares proporcionan unas guías para la industria. Es lo mínimo que tienes que aportar si quieres que tus productos tengan un mínimo de calidad.
- A lo largo de los últimos años, hemos ido conociendo poco a poco al equipo de Bosch en España. ¿Nos podrías contar más o menos cuál es el plan para España para los próximos años? Ya sabes que es un mercado muy deportivo. Existe el problema de que muy pocas ciudades están preparadas para el ciclismo urbano. ¿Crees que aquí está el reto?
Viendo vuestra revista y las fotografías, es impresionante ver cómo veis el mercado español, porque realmente lo veis como nosotros lo vemos: deportivo, pero también urbano. Y ambos se pueden desarrollar mucho más. Es algo que vimos en Alemania, Reino Unido, Francia, Italia… Y ahora para España tenemos un equipo porque queremos estar en el mercado para aprender del mercado y de las necesidades de cada país. El mercado de los motores para bicis es diferente, y vemos un gran potencial en todas las ciudades europeas, en grandes ciudades, pero también en áreas rurales. Podemos transformar transportes basados en el uso principal del coche para que utilicen e-bikes. Sabemos que tenéis unas condiciones metereológicas diferentes. Es más caliente y también hay mucho desnivel. Es algo muy bueno para atletas y para gente que quiera pedalear haciendo ejercicio. Pero no tanto para desplazamientos urbanos. Pero ahora con las e-bikes, podemos decir OK, ya no tenemos que sudar para hacer estos 5Km y ya no necesitamos ir en coche. Básicamente, las e-bikes brindan una oportunidad para repensar tus propias opciones de movilidad. En Barcelona, por ejemplo, hemos oído hablar de unos espacios de la ciudad donde están sacando fuera a los coches.
- Sí, las "Superilles". ¿Qué le parecen?
Sí, exacto. Pues son geniales. De esto no tenemos en Alemania. Me gustaría que estuviese en Berlín o Stuttgart. Tenemos Karlsburg,por ejemplo, o Münster, que son ciudades ciclistas. Y Múnich se está desarrollando magníficamente. Pero hay muchas ciudades que no avanzan en este sentido.
- ¿Porque crees que no lo hacen?
Porque no son lo suficientemente valientes. El alcalde y el consistorio tienen que creer. Tienen que hacer un experimento y ver qué sucede, pero se tarda mucho, con demasiados debates, planes… etc.
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